Frío a partir de gas natural licuado (GNL)
El gas natural (NG – Natural Gas) se encuentra normalmente en forma gaseosa, es decir, es una fuente de energía voluminosa. En la producción de gas natural, este debe ser enfriado a -162 °C para hacerlo transportable. Del gas se obtiene un líquido – LNG (Liquefied Natural Gas) que solo requiere de seis centésimas de su volumen original. Gracias a esta reducción en volumen, el GNL se puede almacenar y transportar mucho mejor que en su forma gaseosa de gas natural. Con frecuencia el GNL se almacena en un sistema conocido como satélite (un depósito de doble pared y aislado al vacío). Con el fin de utilizar el gas natural de un sistema de este tipo satélite como combustible, de nuevo debe ser llevado a un estado gaseoso. En este proceso (también llamado regasificación) se produce valiosa energía de refrigeración.
Eco ice utiliza este frío de regasificación como un potencial energético que permaneció completamente ignorado en el pasado.
Ya solo por razones de coste y por el cuidado al medio ambiente y los recursos obtenibles, la utilización de esta fuente de energía es siempre práctica cuando se utiliza GNL como combustible y al mismo tiempo existen necesidades de refrigeración.
Descarga de nuestro folleto PDF «Ahorro de frío» (uso del frío de la regasificación)